Cómo evitar marearse en un barco

Cómo evitar marearse en un barco

Marearse es el gran temor, y el más popular, entre los que se acercan por primera vez a un barco. No te preocupes, no es indigno ni humillante, cualquiera puede marearse, es una cuestión de entrenamiento o, mejor dicho, acostumbramiento. El mareo es producido por una descoordinación de nuestros sentidos de la vista y el oído, podemos decir que no perciben lo mismo, mientras la vista percibe que estás quieto, el oído percibe que estás en continuo movimiento, lo que provoca un desajuste al que tu cerebro no está acostumbrado, por lo que el cerebro cree que estás envenenado y te obliga a vomitar. Obviamente, cuanto más navegues, más se acostumbrará tu cerebro y conseguirás evitarlo de forma natural. Pero siempre serás susceptible de marearte, nadie se libra de esta posibilidad por muy marinero que seas.

Para los primerizos... ¿Cómo evitarlo? Lo primero y más fácil, tómate una biodramina, o incluso dos si vas a hacer alguna travesía larga o con condiciones más desfavorables. 

Vete mirando la mayor parte del tiempo a tierra, ya que esta no se mueve y no provoca el desajuste sensorial. También te puede servir mirar al horizonte si es que no ves tierra, aunque para una primera vez no creo que sea el caso. Evita leer el móvil, o hacer cualquier otra cosa que requiera tu máxima atención visual (como hacer nudos de pesca, o cosas parecidas), ya que cuando terminas y levantas la cabeza es cuando te das cuenta de que llevas un colocón descomunal y ya no hay vuelta atrás. 

No entres en la cabina del barco, es donde más mareo se produce. Si tienes que entrar al baño, espera a que el barco deje de estar en movimiento, si es que puedes, claro.

También es muy importante lo que hayas hecho la noche anterior, salir de fiesta e ingerir abundante alcohol es muy desaconsejable, a menudo se alquilan barcos para despedidas de solter@s y la resaca es el peor compañero de navegación, ya que tus sentidos ya vienen completamente desajustados. Es conveniente también no cenar demasiados alimentos grasos la noche antes.

Para almorzar en el barco suele venir muy bien las manzanas verdes, su acidez te ayudará a evitar las náuseas. También dicen del jengibre, morder un trozo en crudo, aunque de esto no tengo certeza todavía, nunca lo he probado.